Como combatir los granos y no morir en el intento

¡Hola!

Hoy os voy a hablar de como luchar contra los odiados granos que aún nos siguen saliendo a algunas a pesar de haber superado la treintena. Eso sí, quiero dejar claro que yo no padezco acné severo sino más bien tendencia acnéica, es decir, me salen granos aislados con frecuencia en la cara y el cuello pero no tengo toda la cara llena. Lo digo porque en casos más severos puede que mis truquillos no terminen de servir, no lo sé, habrá que probarlo.

Y voy a ser muy clara y no me cansaré de decirlo: con los granos no hay que tener ninguna compasión. Así que debéis estar dispuestas a sacar todo el arsenal que tengáis en casa para combatirlos. ¡No debe haber piedad! ¡Es la guerra! 

Hay gente que se cree que únicamente usando un sólo producto van a deshacerse de los granos pero no es así. Debemos actuar desde varios frentes y con diferentes armas. Os voy a poner un ejemplo que me pasó este verano. Me fui de vacaciones con dos amigas y a una de ellas le salió ese horrible grano en la barbilla que se empieza a poner enorme, que duele un montón y que sabes que va a terminar con la punta blanca. Yo llevaba parte de mi arsenal (aunque no todo) y le dije: ponte esto y esto y lávate la cara con esto otro y... pero ella se agobió y dijo que probaría una cosa sólo ¿Y que pasó? Pues que el grano se vino de concierto con nosotras y se quedó el resto de las vacaciones. Al cabo de los meses mi otra amiga vino a visitarme a casa un fin de semana y le empezó a salir el mismo tipo de grano. La pobre entró en pánico porque a los dos días se iba de viaje con su recién estrenado novio y, claro, lo último que le apetecía era aparecer con un grano enorme en la barbilla. Así que decidimos hacerle frente e intentar que no fuera a más. Ella, que sí es muy aplicada, me hizo caso en todo y al día siguiente o al otro (no me acuerdo muy bien pero fue seguro antes de irse de viaje) me mandó un mensajito diciéndome literalmente: "Me enorgullece decirte que el grano ha sido vencido". No sólo había remitido sino que además había desaparecido por completo (no había llegado a ponerse blanco ¡Bien!). Así que ya sabéis, y vuelvo a repetirlo, usar todo lo que podáis para combatir los granos, y si es justo al principio mucho mejor (eso sí, nada de pasta de dientes, por favor!!).

Y ahora voy a pasar a explicaos porqué aparecen los granos y qué tipos de acné nos podemos encontrar para así tener más claro qué los produce y cómo eliminarlos. Como siempre digo cuanto más conocimiento tengamos, mucho mejor.

La piel presenta poros que se conectan a través de una red de glándulas sebáceas que producen el aceite o sebo que será el encargado de transportar las células muertas al exterior. Éstas están conectadas a través de los folículos. En general, podemos decir que los granos aparecen por una obstrucción del folículo piloso debida a la acumulación de sebo y células cutáneas muertas, y que en algunos casos se complica detonando un proceso inflamatorio al entrar en contacto con las bacterias que habitan la piel. Las células muertas y la producción de sebo son procesos totalmente naturales. El sebo forma parte de nuestro manto hidrolipídico que aporta flexibilidad a la piel, ayuda a regenerarla cuando se producen heridas y la protege de agresiones externas. El problema viene cuando existe un exceso en la producción de sebo o la eliminación de células muertas no se realiza de forma adecuada. En ocasiones las células muertas no se desprenden y obstruyen los poros impidiendo que el sebo salga a la superficie. Es, entonces, cuando bajo el poro taponado la secreción sebácea continúa y se crea un entorno perfecto para la bacteria epidérmica Propionibacterium acnes que será la que creé la infección, la inflación, y la consiguiente pus.

Causas:

El acné puede aparecer tanto en la adolescencia como en la edad adulta. La causa principal suele ser un cambio hormonal como es el caso de la pubertad, el embarazo, la menopausia o los días previos al periodo menstrual. En adultos también puede estar causado por cambios en la alimentación, medicamentos, cosméticos no adecuados o, incluso, por el estrés ya que éste altera el equilibrio hormonal y, al bajar las defensas, hace que el factor de curación del cuerpo disminuya. 

Si vuestro caso es el acné premenstrual deberéis centraos en prevenirlo ya que durante los días previos se produce un cambio hormonal. ¿Y cómo lo podemos prevenir? Pues reforzando, por ejemplo, la limpieza diaria en los días previos y disminuyendo los alimentos ricos en grasas o azúcares. A medida que vaya avanzando el ciclo el nivel de estrógenos aumentará y mejorará el aspecto de nuestra piel.

Si, por contra, habéis notado que de pronto os sale un brote de acné cuando nunca antes lo padecíais, pensad en si habéis sufrido algún cambio de algún tipo en vuestra vida o rutina (alimentación, cosmética, medicación, mayor carga de trabajo, etc.) e intentad dar marcha a atrás. Esta reflexión a mi me sirve mucho. Hay veces en las que cambios algún elemento de mi rutina y me empiezan a salir más granos y no entiendo muy bien por qué hasta que me paro a pensar ¿Qué hacía antes que ahora no hago? o ¿Qué ha cambiado? Y entonces doy marcha atrás y si mejoro pues ya sé que era lo que estaba haciendo mal. Pensad que en este caso vuestro cuerpo os está avisando de que algo va mal.

Tipos de granos y acné:

- Puntos blancos o comedones cerrados: se trata de protuberancias blanquecinas. En este caso el poro ya estaría obstruido y, por tanto, la secreción sebácea no puede salir a la superficie.

- Puntos negros o comedones abiertos: a diferencia de la creencia popular, los puntos negros no están causados por la suciedad. Se trata de una obstrucción como en el caso anterior pero con la diferencia de que la punta del área obstruida está expuesta a la superficie y, al estar en contacto con el aire, se oxida dándole ese color negruzco.

- Pápulas: se trata de la inflamación del punto blanco. Se manifiestan con protuberancias firmes, pequeñas y en forma de cono. No contienen pus.

- Pústulas: son lesiones pequeñas y redondas, rojas y con el centro blanquecino o amarillento. Éstas sí tienen pus.

- Otros tipos más severos de acné: en esta categoría podemos encontrar los nódulos, los quistes y el acné conglobata. Los primeros son lesiones e inflamaciones en profundidad de la piel y suelen afectar a grandes áreas. Los quistes suelen ser un poco más suaves pero están llenos de pus y la lesión también se produce en profundidad. Y finalmente el acné conglobata es un tipo poco común de acné pero muy severo que suele afectar a la espalda, glúteos, brazos, etc. y que se caracteriza por la combinación de pustulas y nódulos.

En el siguiente gráfico podéis ver más claramente cada tipo.

Mis truquillos para combatir los granos:

 1) Prevención:

Lo primero que tenemos que llevar a rajatabla es una buena limpieza de la piel. Una buena limpieza es lo que hará que se reduzca las probabilidades de que te salgan granos o incluso los llegues a evitar. Como ya expliqué en el post en el que hablada de los cuidados para la piel grasa (si no lo habéis leído, os recomiendo que lo leáis para tener todos los pasos claro) es fundamental que nos lavemos la cara dos veces al día, que la tonifiquemos y utilicemos una crema o maquillaje que sea "no comedogénico" (que no obstruya los poros) y adecuado a nuestro tipo de piel. La limpieza sería el primer paso porque, como he comentado arriba, evitaría que la suciedad ambiente, el maquillaje, el sebo y las células muertas se acumulen y obstruyan los poros. Evitar los productos que lleven alcohol porque resecan mucho la piel y producen un efecto rebote (como falta grasa en la piel se produce más).

¡Ah! Y no os olvidéis de los cuidados semanales: la exfoliación y la mascarilla (en este caso debe ser de arcilla verde o una especial para el acné o piel grasa). También os recomiendo que leáis el post en el que hablo de la técnica de la doble limpieza por si aún usando un limpiador para piel grasa os sigue saliendo granos.

La alimentación también nos puede ayudar bastante. Es recomendable no abusar o eliminar de nuestra dieta alimentos ricos en azúcar, grasas trans, hidratos de carbono, leche, etc. Este tema es bastante interesante aunque también bastante desconocido (y reconozco que yo aún no he hecho el experimento) así que más adelante intentaré hacer un post específico sobre como nos puede afectar la alimentación.

  2) ¿Y qué hago si me está saliendo el grano o ya me ha salido?

• En cuanto aparezca los primeros indicios de que va a aparecer un grano, poneos un pegote de arcilla verde en él y dejadlo bastante tiempo. La arcilla tiene propiedades absorbentes y, por tanto, secará la grasa acumulada dentro. Esto lo podéis repetir varias veces, cuantas más mejor. (Una curiosidad una amiga me contó que también sirve para picaduras de avispas porque absorbe el veneno). 
• Usad aceite de árbol del té: este aceite como ya sabéis tiene propiedades bactericidas así que nos viene de perlas para eliminar la infección. A veces me pongo una gota junto con el pegote de arcilla para amplificar sus propiedades y otras después (o incluso antes y después, jaja). La verdad es que no sé que es mejor, de las dos formas me ha funcionado. 
• Usad un gel, stick o roll-on que trate los granos: normalmente suelen llevar aloe vera y aceite de árbol del té. Yo ahora mismo estoy usando el de Lush y me va bastante bien. Póntelo tantas veces como te acuerdes pero al menos mañana y noche (yo por la noche me pongo, además, mi bálsamo de Idoki pero como ya sabéis las que me seguís lo han dejado de fabricar). 
• Usad un corrector de imperfecciones que sea curativo: de esta manera no os veréis el grano y habrá muchas menos probabilidades de que lo intentemos estrujar, al mismo tiempo os lo trata. También podéis mezclarlo con la crema hidratante.

Así que mi plan de ataque sería: Limpieza (técnica de la doble limpieza), arcilla, aceite de árbol del té, gel y corrector curativo. Por la mañana si tengo que salir utilizaría todo salvo la arcilla.

Otros remedios naturales que podéis usar contra los granos:

Cuando empecé a buscar información respecto a este tema me encontré con algunos trucos interesantes que no conocía y que pienso usar como armas de destrucción masiva.

• Zumo de limón: El ácido cítrico es un blanqueante natural que tiene la capacidad de reducir las cicatrices y la hiperpigmentación. Además, este ácido es capaz de destruir las bacterias que causan el acné y está catalogado como un ácido hidroxilo (AHA), es decir que tiene propiedades exfoliantes. Se recomienda su utilización directamente sobre la piel (puro o diluido si tienes piel delicada). Se deja reposar unos minutos y se enjuaga (a este respecto he encontrado diferentes opiniones, desde unos pocos minutos a 15 minutos o incluso  toda la noche) . Se puede aplicar solamente en los granos para secarlos o en toda la cara para reducir las cicatrices. En casos más severos se puede dejar toda la noche pero nunca, bajo ningún concepto, se debe poner por el día porque es foto sensible. Este truquillo pienso utilizarlo desde YA!. Ya os comentaré como me va. Si estáis interesadas en saber más sobre el tema os dejo un link donde explica muy bien como usarlo. 
• Aloe vera: es bactericida y altamente regenerativo. Ayuda a reducir la inflamación y las cicatrices. Una conocida mía que trabaja en un restaurante y que, por lo tanto, está todo el día rodeada de grasa (esto también influye) sufría de granos constantemente. Empezó a usar la pulpa directamente sobre la piel. La dejaba reposar o incluso la dejaba toda la noche y luego la enjuagada. La cara le mejoró mucho y cuando le pregunté, me comentó este truco. 
• Avena: la avena tiene la capacidad de absorver la grasa de la piel, al mismo tiempo que la exfolia. Además, es astringente y calmante. Se puede mezclar solamente con agua y frotar la mezcla suavemente por la piel. También se puede mezclar con miel u otro elemento curativo. Se deja actuar 20 minutos y se enjuaga bien (¡cuidado de no atascar las tuberías!). 
• Ajo: al ser antibiótico es ideal para conseguir que los granos no se infecten. Además, contiene elementos que aceleran la maduración de los granos. Se prepara una pasta con ajo machacado (sólo o con aceite de coco) y se extiende por la cara, se deja actuar unos minutos y a continuación se enjuaga. También se puede mezclar en una mascarilla con arcilla verde (se cuela el aceite y se pone en la cara antes de la arcilla).

Y esto es todo por hoy, que no es poco. Espero que os sirva de ayuda. ¿Y vosotras tenéis algún truco infalible?